martes, 25 de octubre de 2011

Jaca, Peña Oroel y arcoiris...

Seguramente, después de una tormenta veraniega,

un arcoiris doble se despliega sobre el valle.

Tarjeta postal de principios de los años 70.

(Archivo de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).



Avenida de Zaragoza, Jaca...


¿Se llamó alguna vez, esta avenida, que ha tenido tantos nombres,

Avenida de Zaragoza...?

¿Puede ser una confusión del editor de la tarjeta postal...?
(Archivo de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

lunes, 24 de octubre de 2011

Cuartel de la Victoria, Jaca...

Antigua tarjeta postal del Cuartel de la Victoria.

(Archivo de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

sábado, 22 de octubre de 2011

..."os menutos"...

El carapuchete o diablillo familiar, era muy aficionado a las travesuras domésticas...
Igualmente, "os menutos", procedentes de los valles de Echo y Ansó, se encargaban de hacer los objetos y otros enseres de la casa, "perdedizos", (...expresión de mi abuela Gertrudis...), cuando eran molestados por alguien de la familia con la que compartían techo.
Vivían entre la paja, que, habitualmente se almacenaba en el desván, o espacio superior de la casa. Se dice que tenían un marcado color verde..., y que había que llevarse bien con ellos, so pena de no encontrar las tijeras, el dedal, el reloj de bolsillo, los cubiertos...
Podían trastocar la tranquilidad hogareña...
No robaban nada...
Simplemente, escondían las cosas...
Que aparecían donde y cuando menos se esperaba...
¿Cómo eran "os menutos"...?
Pues no lo sé...
También me pregunto si existen todavía..., si hay alguna especie urbana, a la que achacar la pérdida de todo cuanto no encontramos...

(La información sobre "os menutos", se debe a Félix Retuerto Pescador, que oyó hablar de ellos siendo niño, y que, años más tarde, volvió a tener referencia de ellos. ¡Gracias por recordarlos!).

viernes, 21 de octubre de 2011

Una buena nevada en el "rompeolas"...

Tras una buena nevada, luce el sol...


Al fondo, se puede ver la Sierra de San Juan...


(Archivo de Guillermo Pérez Pérez


y Enrique Pérez Tudela).


Vista general de Jaca...

Una vista general de Jaca, de fecha sin




determinar, aunque es posible situarla a principios del S.XX.




Puede apreciarse la Ciudadela o Castillo de San Pedro de Jaca.



No se distingue con claridad el autor de la fotografía,




abajo, a la derecha, ya que aparece borroso.






(Archivo de Guillermo Pérez Pérez




y Enrique Pérez Tudela).




Nieve en la estación de Jaca...

La estación de ferrocarril de Jaca

cubierta por la nieve.

Fecha sin determinar.

(Del archivo de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

viernes, 14 de octubre de 2011

Buenos consejos...



Hace unos días, hablando con el P.Damián Bello, comentábamos

cosas del antiguo colegio, entre ellas, los carteles que había en el

claustro bajo, unos carteles alargados, cada cual con una

sentencia o consejo escrito en él.

¿Qué fue de aquellos carteles, plagados

de buenos consejos...?

¡Quién sabe...!

Recuerdo unos cuantos, y, aunque quisiera recordarlos todos,

ya no me es posible...

En los entresijos y laberintos de mi memoria, quedan estos:

"La juventud corrompida,

es fruta verde y podrida".

"La calumnia y la mentira,

de Dios provocan la ira".

"Quien en las fiestas trabaja,

verá en sus bienes rebaja".

"Los delitos aborrece,

y al culpable compadece".

"Buen porte y finos modales,

abren puertas principales".

¡Cuántas veces leyera yo

aquellos pareados, pintados sobre un fondo

imitando mármol,

con una letra sobria y elegante,

y enmarcados en madera oscura,

también con sobriedad

y tan sólo algún remate,

para evitar caer

en una rigidez excesiva!

¡Qué grandes lecciones pendían de aquellas venerables paredes!

¡Ojalá quede alguien que los recuerde todos,

y los haya puesto en práctica a lo largo de su vida!

Porque..., habrá sido feliz...

(Imagen: La calle Mayor, nevada, desde

el monasterio de las MM. Benedictinas.

Se puede apreciar el Colegio

de los PP. Escolapios.

Principios de febrero de 1978.

Archivo de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

martes, 11 de octubre de 2011

Dichos de antaño... y de hoy...



Otro dicho de mi abuela:

"Para Todos los Santos,

la nieve, por los altos...

Y para San Andrés,

la nieve, por los pies..."

Camino llevamos este año, sí...

San Andrés, se celebra

el día 30 de noviembre.

(Imagen: Archivo familiar de

Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

Dichos de antaño... y de hoy...

El hijo de un muy querido amigo,

suele decir: "Madre no hay más que una...,

afortunadamente..."

Y tiene razón, porque si ya hemos derramado

abundantes lágrimas por una,

no quiero ni imaginar si tuviésemos que llorar

a dos madres...

En los atardeceres de verano, bajo la parra,

enfrascado en un libro, no me daba cuenta

de que la tarde iba declinando...

Entonces, mi madre, me traía, en una bandeja

de porcelana blanca, decorada con espigas,

un racimo de uva moscatel, un pedazo de queso

y unas rodajas de pan...

Y me decía, con gesto goloso:

"Uvas y quesos...

¡saben a besos...!"

Del tono estoico de mi abuelo,

al certeramente epicúreo de mi madre,

había un abismo...

Y la tarde caía...

(Imagen: Mi madre, de niña. Del archivo familiar de

Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).




Dichos de antaño... y de hoy...

Mis abuelos, Gertrudis y Enrique.

Mi abuelo, es el del dicho ese sobre

las veleidades del tiempo atmosférico.

Mi abuela Gertrudis, ¡bendita mujer!,

me enseñó un dicho, que sonaba

a cancioncilla popular:

"Pa´ la Virgen de Agosto,

pintan las uvas...

Y pa´ la de Septiembre

ya están maduras..."

Era un goce observar cómo las uvas de la parra

que cubría la terraza,

se iban coloreando...

Iban perdiendo el tono verde,

y poco a poco,

tomaban el color

que las hacía apetecibles...

(Imagen: Archivo familiar

de Guillermo Pérez Pérez

y Enrique Pérez Tudela).

Dichos de antaño... y de hoy...



Era frecuente escuchar:

"Para San Antón,

a las cinco con sol..."

Claro, que, entonces, no existía

la majadería esa del cambio de hora...

En las frías y oscuras tardes de enero,

sonaba como un consuelo,

el saber que, poco a poco, los días se iban alargando.

San Antón, el 17 de enero...

Bendición de los animales...

Gatos, perros, caballos...,

incluso otros más exóticos...

(Imagen popular del bendito San Antón).

Dichos de antaño... y de hoy...

Mi abuelo, que era bastante socarrón,

a pesar de sus achaques, entre ellos el asma,

solía asomarse por las mañanas al balcón que daba a un

patio interior, por donde trepaba el grueso tronco de la parra,

y, tras asegrarse de que la Peña Oroel seguía en su sitio,

decía, con un aire digno de un filósofo estoico:

"Hoy...,

lloverá..., o no lloverá...

Y...

hará un tiempo

u otro..."

En fin...

Que Dios lo tenga en su Gloria,

pero habrá sido mejor, que,

al cruzar el río Leteo,

y beber de sus aguas,

olvidara el famoso dicho,

tantas y tantas veces repetido.

(Imagen: Balcón de la antigua casa. lasfotosdelcoco).



Dichos de antaño... y de hoy...

Domingo Buesa, que me honra con su amistad desde..,

(...vamos a dejar las fechas tranquilas...),

me enseñó un dicho, muy gracioso, muy familiar

y entrañable, que sugiere otros tiempos, ya lo creo que sí:

"Lunes, martes, miércoles,

tres,

jueves, viernes, sábado,

seis,

y el domingo,

siete,

decía el carapuchete..."

El carapuchete era el diablillo familiar, que rondaba por los rincones

oscuros, y al que se atribuían ciertas travesuras, como una llave,

que, después de mucho tiempo, aparecía dentro del bote del azúcar...,

y otras trastadas por el estilo...

(Imagen: Cortesía de buesaenvanguardia).




domingo, 9 de octubre de 2011

¡Saludos a los nuevos seguidores...!

Tras un tiempo de ausencia, me encuentro con la grata sorpresa de que este blog ya tiene veinte seguidores.
¡Mi agradecimiento a cuantos se han incorporado a él, enviándoles un cordial y amistoso saludo...!
jacaenlamemoria saluda nuevamente a los seguidores veteranos, y agradece su fidelidad a este rincón de internet, donde se pretende recordar otros tiempos de la Ciudad de Jaca...
¡Muchas gracias, y bienvenidos!

sábado, 8 de octubre de 2011

R.P. Damián Bello, de la Escuela Pía...

Querido P. Damián: Ante todo, mi enhorabuena, mi más cordial, afectuosa y sincera enhorabuena...
Fue antes de la pasada Navidad, cuando tuve noticias de su futura ordenación sacerdotal...
Y la noticia corrió entre todos aquellos que lo conocimos, y que tuvimos la feliz ocasión de convivir con usted, de una u otra forma...
Pero el mayor grado convivencia y comunicación fue en la nieve..., esa nieve de Candanchú, en aquellos años de finales de los sesenta y principios de la década de los setenta...
Conservo algunas fotografías..., y, como decimos siempre, "parece que fue ayer"...
Ha pasado el tiempo para todos...
Aquella "pandilla" de entonces..., estamos desperdigados por el mundo...
Unos, más cerca de Jaca, otros, muy lejos...
Pero, yo creo que todos mantenemos un vínculo con la ciudad...
Del antiguo y querido colegio, sólo existe una imagen en nuestra memoria...
Imagen que no se ve alterada por el trsnscurso de los años...
Aquel colegio de nuestra dorada infancia...
Recuerdo su cuarto, en la primera galería...
El sol iluminaba las plantas, que, defendidas de la intemperie por las cristaleras, lucían sus flores y su verdor todo el año...
En fin...
Yo, a usted, lo recuerdo siempre joven y dinámico...
Con el rostro quemado por el resplandor de la nieve...
¡Felices fines de semana en aquellas pistas...!
Y, de pronto, me entero de que va a recibir la dignidad sacerdotal.
El "catecismo" de aquellos tiempos, al principio de los sesenta, nos enseñaba que existen tres sacramentos que imprimen en el alma una señal imborrable...
P. Damián, ya ha recibido los tres...
Hubiera querido estar presente, participar de su íntimo gozo, pero no ha podido ser...
Lo he intentado, pero, cuando leí la noticia en "El Pirineo Aragonés", usted ya era sacerdote...
Debió de ser un día muy especial en su vida..., seguro que sí...
Ser ordenado a la edad de setenta y seis años, es señal evidente de que nunca es tarde...
¡Ánimo, queda muchos años por delante!
Que su nueva misión en este mundo, deje, y no dudo de que así será, un dulce recuerdo, de bondad, compresión y amor...
¡Enhorabuena, Padre Damián!
¡Es un privilegio poder llamarlo así!: Padre...
Ruegue por todos nosotros, recuérdenos cuando se aproxime al altar, y celebre el memorial de la Eucaristía..., dedíquenos unos instantes, para que su plegaria por todos nosotros llegue a esas Alturas, por ahora inalcanzables...
¡Dichoso usted, y bendito sea, porque ahora..., está más cerca de Dios...!